En ocasiones el celo de unos empleados es más eficaz que la investigación policial. Es lo que ha sucedió la semana pasada en Premià de Mar. El interés de los empleados de la empresa de vigilancia de playas Marsave permitió a la policía capturar a un ladron responsable de haber sustraído diverso material de esta empresa y recuperar todo lo robado. En total desfibriladores, prismáticos y otro material utilizado por los socorristas de las playas de Premià para realizar su trabajo. Un material valorado en unos 3.200 euros.
El material fue sustraído el martes de la semana pasada, según explicó Ràdio Premià, de la caseta prefabricada que la empresa Marsave tiene instalada en la playa de Llevant.
Tras el robo, los propios trabadores advirtieron que el material sustraído había sido puesto a la venta a través de una aplicación de teléfonos móviles dedicado a la venta de productos de segunda mano entre particulares. Los trabajadores de Marsave, dieron cuenta de ello a la Policía y este preparó un operativo que acabó con la detención del ladrón y la recuperación del material. El coordinador de Marsave en Premià de Mar, Edgar Gila, hizo de cebo para que los Mossos detuvieran el responsable del robo, según explica la emisora local.
A partir de ahora, para evitar nuevos sustos como este, los vigilantes llevarán todo el material a un almacén una vez finalicen su jornada laboral.
