La Guardia Civil de Barcelona ha detenido a cinco personas y ha investigado dos más por vender vehículos de segunda mano con el cuentaquilómetros manipulado. Esta organización habría alterado el kilometraje de más de 300 vehículos casi todos ellos vendidos en la provincia de Barcelona y con ello habría obtenido unos beneficios de más de medio millón de euros. Algunos de estos vehículos podrían haber sido adquiridos por vecinos del Maresme.
La investigación de la Guardia Civil se puso en marcha a raíz de la denuncia de varios usuarios que compraron un vehículo a unas personas de origen serbio. Todos ellos habían descubierto, una vez habían adquirido los coches, que estaban mecánicamente muy deteriorados. Tras las primeras investigaciones, el cuerpo armado determinó que los cuentakilómetros habían sido manipulados e identificó a dos personas como presuntos responsables
Al parecer la banda adquiría coches que parecían nuevos pero que en realidad tenían muchos quilómetros por lo que podían adquirirlos a bajo precio. Para adquirir los coches la organización iba a puntos donde había gran cantidad de taxistas como el Aeropuerto de Barcelona o en el mercado de venta italiano.Una vez los coches se habían adquirido legalmente, eran trasladados a un local clandestino que tenía la organización en Barcelona, donde se les manipulaba el cuentakilómetros.
La alteración del kilometraje se hacía con un software a través del sistema electrónico del vehículo, con el que accedían al ordenador de control. Finalmente, la venta de vehículos se hacía con anuncios en conocidas páginas web dedicadas a todo tipo de productos de segunda mano o mediante un canal de venta directa al cliente que utilizaba una empresa de compra-venta de vehículos ubicada en Valencia. Paralelamente la organización, con el fin de consolidar la estafa, pedía un duplicado de la Tarjeta de Inspección Técnica (ITV) alegando que había perdido el original, lo que le permitía tener constancia de los kilómetros manipulados. Esta documentación, una vez manipulada, era aportada al cliente en el momento de la compra del turismo.
Una vez terminada la investigación, la Guardia Civil procedió a la entrada y registra del taller de la organización, situado en Barcelona, donde se obtuvieron numerosas pruebas. Entre otros objetos, se intervinieron una treintena de conectores de traspaso de datos a través del sistema electrónico para diferentes modelos de vehículos, numerosa documentación, tres discos duros para su análisis y el programa clave grabador, que es un pequeño dispositivo que se utiliza para reprogramar los cuentakilómetros digitales y manipularlos. Además, también se decomisaron diez coches y dos motos que estaban al local.
A los cuatro detenidos y a las dos personas investigadas por este caso se les acusa de presunta comisión de delitos de estafa, adquisición, falsificación documental, pertenencia a organización criminal, contra la salud pública y fraude del suministro eléctrico.