Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado 22 de diciembre a una mujer de 43 años y un hombre de 63 acusados de un delito de robo en varios domicilios de Cerdanyola del Vallès y Premià de Mar. Se les detuvo en el aeropuerto de El Prat cuando estaban a punto de volver a Chile, de donde son originarios, y se les requisó un importante botín fruto de sus hurtos.
Los Mossos sospechan que la pareja podría ser lo que se conoce como ladrones «temporeros», ladrones que pasan unos días en un lugar para robar y luego vuelven a su país de origen con el botín. En su equipaje se encontraron numerosas joyas, relojes de alta gama, teléfonos móviles, ordenadores y dinero en efectivo.
Las investigaciones comenzaron a principios de noviembre cuando se detectó un aumento de los robos en el área de Cerdanyola. Paralelamente, se identificaron dos vehículos sospechosos en un área de servicio de Montcada i Reixac. Los agentes de investigación de Cerdanyola relacionaron los dos turismos con los robos que se estaban cometiendo en la zona y descubrieron que los coches habían alquilado en el aeropuerto y que estaba previsto devolverles el 22 de diciembre.
Los Mossos sospecharon que los ocupantes de los vehículos tenían la intención de volver a su país y que, probablemente, lo harían con el material robado. El día 22 interceptaron la pareja cuando iban a embarcar con destino a Chile y les intervinieron el equipaje, donde se encontró el botín. El día de Navidad, los ladrones temporeros pasaron a disposición del juez, que decretó la libertad con cargos.