La policía local de Pineda decomisó la semana pasada 340 kilos de alimentos que se transportaban en dos vehículos sin las garantías sanitarias. Los agentes llevaron a cabo una actuación de control acompañados de los inspectores de la Dirección General de Transporte y el técnico de Salud del Ayuntamiento. En el control se revisaron 23 coches. Los alimentos fueron trasladados a la deixelleria, donde fueron destruidos.