
Un estudio sobre la situación de los bosques del Maresme y parte del Vallès Oriental, encargado por la Diputación de Barcelona, constata la negativa evolución de la superficie de pino piñonero (Pinus pinea) afectada por el escarabajo perforador Tomicus destruens. El estudio, realizado por el Servicio Cartográfico y Geológico de Cataluña (ICGC), y presentado este jueves en la jornada sobre el estado actual de los bosques del Maresme, inaugurada por el diputado adjunto de Espacios Naturales, Jesús Calderer, en Mataró, muestra un descenso del vigor de las masas forestales de estas comarcas, sobre todo los pinares orientadas al sur. Las imágenes del satélite que forman parte del estudio no dejan lugar a dudas sobre la propagación de la plaga.
La importancia del estudio radica en que puede convertirse en una herramienta de gestión relevante para la gestión forestal para prever cuáles pueden ser las nuevas zonas afectadas de decaimiento del pino piñonero, teniendo en cuenta la forma de propagación del escarabajo perforador.
En su intervención, Jesús Caldereros, ha destacado la importancia del estudio para explicar de qué afectación estamos hablando, y cuál es el alcance de esta plaga, y a partir de ahí, podremos actuar con más elementos.
Calderer también ha recordado el apoyo que la Diputación de Barcelona está dando para hacer actuaciones y también de apoyo económico a las asociaciones de propietarios forestales, para combatir la plaga, señalando también que «una vez lo hayamos controlada, debemos tener claro cómo se ‘debe continuar a partir de la una nueva gestión y planificación forestal. Estamos en una zona con mucha superficie boscosa y se ha de conseguir que los propietarios forestales trabajen de manera correcta sus bosques ».
Observación de la evolución por satélite
El estudio muestra, a partir de mapas por satélite de la misión de observación terrestre Sentinel-2 en los verano de 2015 y 2016, y que se repetirá este verano de 2017, la evolución y el estado de las superficies de bosque con varios grados de vegetación de secano. A partir de esta evolución se puede aventurar, si las condiciones meteorológicas son similares a las de años anteriores, especialmente en cuanto a la pluviometría, las áreas en que se puede extender la enfermedad, que desemboca en la mortalidad de un número importante de ejemplares, y que se debería actuar para frenar su propagación.
Para luchar contra esta plaga, que ha cobrado fuerza en los últimos años especialmente por factores como la sequía y las temperaturas cálidas de los meses invernales, la Diputación de Barcelona está apoyando acciones de gestión forestal en las zonas más afectadas y soporte técnico a través del convenio con las asociaciones de propietarios forestales, como son la asociación del Montnegre-Corredor, desde el año 2014, y la asociación de la Serralada Litoral Central, desde el año 2015.
Las características y condiciones en las que se encuentran los bosques del Maresme y algunas zonas del Vallès Oriental hacen que la gestión forestal sea compleja y poco rentable. A estas dificultades en relación a la silvicultura, se suma el hecho de que se trate de una zona muy humanizada con una fragmentación importante de la propiedad y la copropiedad de la mayor parte de las fincas, lo que dificulta sobre todo la gestión burocrática de las actuaciones.