Muy pronto las pinturas murales de la capilla dels Dolors de la Basílica de Santa Maria de Mataró volverán a lucir como en el pasado. A finales de agosto se han de poner en marcha las obras de restauración de esta joya del barroco catalán obra de Antoni Viladomat.
Las obras de restauración de estos murales que ocupan unos 300 metros cuadrados costará más de medio millón de euros y está financiado por la Generalitat, el Obispado de Barcelona y el Ayuntamiento de Mataró.
Un equipo de 12 conservadores y restauradores trabajarán para acabar con la degradación que sufren estas pinturas murales debido a la humedad y de una mala operación hecha años atrás. Los trabajos se llevarán a cabo bajo la dirección del Centre de Restauració de Bens Mobles de Catalunya (CRBMC). La directora de este ente del Departamento de Cultura de la Generalitat, Àngels Soler, ha explicado a Ràdio Mataró que el proceso para devolver la obra de Viladomat a su máximo esplendor es muy delicado y necesita de un trabajo que vaya centímetro a centímetro y que se llevará a cabo en varias fases.
La primera fase de destinará a fijar las pinturas en su soporte original y evitar desprendimientos, la segunda pasa por la consolidación de las pinturas y la última será la limpieza de los murales. Todo el proceso se hará siguiendo los criterios internacionales de preservación y conservación: materiales y productos reversibles que no perjudiquen la obra.
Antes de llegar a las obras de restauración, en 2013 ya se llevó a cabo un estudio previo, financiado por el Ayuntamiento. El estudio permitió conocer qué tipos de materiales forman las pinturas y, en base a su estado de conservación, se pudo determinar cuál era el proceso más adecuado para recuperarlas.