Vecinos del barrio del Pla d’en Boet de Mataró llevaron a cabo este miércoles una acción simbólica en la última oficina de Caixa Laietana que aún mantenía el rótulo de la entidad, cinco años después de que cerraran la oficina y de la absorción por parte de Bankia. Los activistas han hecho una pintada para tapar el letrero y reclaman a Bankia que el local, que actualmente está en venta, se pueda ceder a las entidades del barrio. «Ya han robado bastante a los mataroneses como para continuar cobrando», espetó el presidente de la Federació d’Associacions Veïnals de Mataró (FAVM), Juan Sánchez. El líder vecinal también reclama que el edificio de la antigua sede central de Caixa Laietana, que se ubica en el mismo barrio, se convierta en un hotel de entidades.