La unidad de los Mossos de Grupos Juveniles Organizados detuvo, el pasado 9 de marzo, a cinco miembros de una banda de motoristas como presuntas autoras de una paliza por encargo. Las detenciones se llevaron a cabo en un operativo en Lloret de Mar, Sant Cebrià de Vallalta y Vidreres que culminó con la detención de la hombre que encargó la agresión y de cuatro de los miembros de la banda que la llevaron a cabo, ya que el quinto se encontraba interno en el centro penitenciario de Dijon (Francia) en el momento de las detenciones. Tras declarar en sede judicial, el juez decretó libertad con cargos de los cinco detenidos.
Los hechos que motivaron las detenciones se remontan al 20 de diciembre cuando cinco miembros de la banda ‘Loods Nomads Motor Club’, entre los que se encontraba su presidente, agredieron a una persona en un bar de Vidreres con armas blancas y defensas extensibles.
Esta agresión fue encargada por una sexta persona que quería vengarse de la víctima presuntamente por una deuda que tenían relacionado con el tráfico de sustancias estupefacientes.
Los autores de la agresión, que llevaban chalecos con simbología propia de la banda, llegaron al lugar donde se encontraba la víctima con un vecino de Vidreres, que fue quien les señaló a quienes tenían de agredir. La víctima entró en un bar para repeler la agresión aunque no lo consiguió y siguió recibiendo golpes hasta que quien ordenó la agresión les ordenó que pararan.
Como resultado de la agresión, la víctima sufrió heridas de diversa consideración y tuvo que ser tratada de las lesiones causadas.