Centenares de personas participaron este domingo 21 de agosto en el acto que convocó l’Assemblea Nacional Catalana (ACN) de Maresme en Arenys de Mar. El acto, que contaba con el aliciente de la presencia del presidente de la ANC, Jordi Sánchez tenía un aire festivo y estaba destinado a grabar un video para animar a la participación en la Diada que este año, y a estas alturas, flaquea en inscripciones. Estas son actualmente unas 100.000, la mitad de las que tenían en estas mismas fechas el año pasado. El discurso de Jordi Sánchez fue de final de etapa.
El presidente de la ANC dijo que este otoño el Parlamento estará «probablemente en condiciones» de anunciar que convocará un referéndum vinculante sobre la independencia. «Es la demanda de la ANC a las instituciones», ha insistido el dirigente de la entidad soberanista. Cree que si es así, el proceso entrará en un punto de no retorno. En este sentido, Sánchez ha defendido el denominado Procés pero seguidadamente a advertido que «Debemos decir que o empezamos a terminarlo o acabará con nosotros, lo hemos hecho todo en la calle y en las urnas». Sánchez ha instado también a los cargos públicos a mantenerse en los escaños y en los despachos si llegan inhabilitaciones. El presidente de la ANC hizo un llamamiento también a los comunes a «no tener miedo a la democracia» ya defender el derecho a la autodeterminación «desobedeciendo prohibiciones» tal como han hecho «en otros ámbitos».
En el acto también intervino la alcaldesa de Arenys de Mar, Annabel Moreno, en representación de alcaldes y concejales del Maresme quien dijo que el mundo local cuenta con capacidad de llevar el peso «si llegan inhabilitaciones». Muchos regidores, especialmente de ERC, estuvieron presentes en el acto.
