Mossos de la comisaría de Mataró denunciaron el día 21 de febrero a un hombre de 34 años, de nacionalidad española y vecino de Mataró, como presunto autor de los delitos de falsificación documental, usurpación de funciones públicas y un delito de tenencia de armas.
Los hechos sucedieron alrededor de las 08.30 horas del día 21 de febrero cuando agentes de paisano vieron a un hombre que salía de un inmueble a mucha velocidad y se metía dentro de un vehículo particular que estaba estacionado en frente, en una zona de carga y descarga. A los Mossos el hombre les pareció sospechoso porque iba equipado con un chaleco y un cinturón muy similar al que llevan los policías y llevaba un arma de fuego.
Cuando el vehículo iniciaba la marcha los agentes le cruzaron delante el vehículo policial para evitar que se fuera. Al acercarse al coche observaron cómo el ocupante escondía algo detrás del asiento. Durante la identificación confirmaron que este hombre llevaba puesta un falso chaleco antibalas y un falso cinturón policial con compartimentos.
En el registro del vehículo se localizaron cuatro distintivos de vehículo oficial de la Generalidad de Cataluña con logotipo, tres aparatos tipo walkie-talkie, un spray de defensa personal, 22 cartuchos detonadores en la guantera y una pistola, que resultó ser detonadora , que el hombre había escondido detrás del asiento del conductor.
Además, el vehículo llevaba instalados un equipo de luces y sirena iguales a los que utiliza un vehículo policial de paisano. En el maletero se localizaron varias chalecos reflectantes de servicios de emergencias, linternas y conos con el logotipo de la policía.
Además, los agentes pudieron detectar que el denunciado desprendía un fuerte olor a alcohol y fue sometido a las correspondientes pruebas de detección en el que dio positivo en alcohol y también en drogas.
El hombre, con antecedentes por hechos similares, fue trasladado a dependencias policiales donde, voluntariamente, desmontó y entregó los equipos de luces y sirena que tenía instalados en el vehículo particular.
El caso ya se encuentra en manos del Juzgado de Mataró a la espera de juicio.