En Malgrat de Mar buscan sistemas alternativos para acabar con la plaga de los grafitis que ensucian las paredes y el mobiliario urbano. Hace unos días, la policía local sorprendió a uno de ellos y el joven – un menor de edad denominado Nil- en lugar de pagar la correspondiente sanción administrativa en forma de multa económica, ha sido obligado a hacer frente a su falta con un trabajo singular: pintar el escudo de la policía local en una pared de la comisaría. El resultado del trabajo del grafitero fue difundido por la policía local de Malgrat el pasado día 14 a través de sus redes sociales. Se trata de una pintura que ocupa toda una pared. Fuentes de la policía local señalaron que esta vez se había optado por hacer pagar la falta con esta fórmula de trabajos comunitarios, porque al parecer las multas económicas no funcionan y los grafiteros vuelven a las andadas. En muchas ocasiones esto sucede porque los grafiteros argumentan insolvencia económica.
Los vecinos de Malgrat han indicado en diversas ocasiones su preocupación por el problema de las pintadas que ensucian las paredes del pueblo. El jueves pasado en el encuentro que el alcalde, Joan Mercader, realizó en el Archivo Municipal con una treintena de vecinos con el objetivo de que le hicieran llegar de primera mano preguntas, problemas o propuestas, esta fue la preocupación más repetida. El alcalde explicó las actuaciones que se llevan a cabo desde hace tiempo por la Policía Local y los servicios municipales para combatir estas acciones incívicas. También insistió en que este problemática se debe combatir desde la prevención, la educación y la pedagogía. «Tenemos que enseñar a los jóvenes a amar al pueblo, a amar lo que es de todos, porque no quieran ensuciarlo», apuntó el alcalde.