El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha recomendado a 14 municipios catalanes que modulen o supriman el toque nocturno de las campanas porque molestan el descanso de los vecinos. Entre estos municipios hay tres de la comarca del Maresme: Tordera, Palafolls y Arenys de Mar.
Según ha informado este jueves el Síndic de Greuges, las molestias derivadas del impacto acústico de esta tradición generan numerosas quejas entre los vecinos.
Durante los últimos meses, el Síndic ha recomendado a los ayuntamientos de 14 localidades catalanas «que tomen las medidas necesarias para garantizar el derecho al descanso de la población y eviten las molestias derivadas del toque de las campanas».
Rafael Ribó ha dirigido esta sugerencia a cada consistorio, con las especificaciones propias de cada caso, después de haber investigado las quejas que le han presentado los vecinos afectados.
Aunque el toque de las campanas de las iglesias es una práctica tradicional propia, arraigada más allá del ámbito religioso, el Síndic ha alertado de que la Ley de protección contra la contaminación acústica no la prevé como una excepción o como un fenómeno no sujeto al cumplimiento de la normativa.