Los Mossos de la comisaría de Cornellà detuvieron el pasado jueves, 21 de abril a dos hombres entre 32 y 45 años, de nacionalidad marroquí y argelina y vecinos de Mataró, como presuntos autores de 11 delitos de robo con fuerza en domicilios de Cornellà de Llobregat y Martorell, Granollers y la Llagosta y Terrassa. Los dos detenidos, con cuatro antecedentes policiales, pasaron a disposición del juzgado de instrucción número 3 de Cornellà de Llobregat, que es quien ha tutelado la investigación y el juez decretó su ingreso en prisión. La mujer de uno de los arrestados ha sido denunciada por los mismos hechos.
El primer hecho que motivó el inicio de la investigación sucedió el 2 de febrero cuando se cometió un robo con fuerza en el interior del domicilio de una mujer en Cornellà de Llobregat.
A partir de este robo los investigadores centraron sus pesquisas en los grupos especializados en este tipo de delito hasta que identificaron dos miembros de un grupo criminal muy activo en robos con fuerza en domicilios.
Este grupo se dedicaba principalmente a asaltar domicilios de personas que regentan comercios y que en la mayoría de los casos eran de nacionalidad china y paquistaní.
Los investigados se trasladaban a las diferentes ciudades de Cataluña y cuando localizaban la posible víctima iniciaban vigilancias y seguimientos destinados a obtener la información necesaria sobre sus horarios y rutinas personales.
Una vez disponían de esta información, ejecutaban el robo con fuerza en interior de domicilio cuando no había nadie en su interior.
El Jueves, 21 de abril, explican los Mossos, se realizaron dos entradas simultáneas en los pisos de Mataró donde residían los dos hombres investigados. Allí se les detuvo y se decomisaron casi 35.000 euros en metálico, joyas, relojes de gama alta, bolsos de lujo, aparatos tecnológicos y juegos de llaves empleados para forzar las cerraduras de los domicilios afectados.
Se les imputan, hasta el momento, 11 robos en interior de domicilio en las ciudades de Cornellà de Llobregat, Martorell, Granollers, La Llagosta y Terrassa de donde obtuvieron un botín aproximado de 50.000 euros en metálico, joyas, aparatos electrónicos y artículos de lujo.
El análisis detallado de los objetos recuperados ha permitido constatar cómo este grupo criminal hacía tiempo que actuaba en toda Cataluña, dado que se han encontrado objetos sustraídos en 2014 de domicilios tan alejados como Tarragona y Lloret de Mar.
Se da la circunstancia de que uno de los detenidos enviaba el dinero robado a su país de origen, Argelia, y los invertía en la reforma de una casa.