Agentes los Mossos de la División de Investigación Criminal, adscritos al Área de Investigación Criminal de la Región Policial Metropolitana Nord detuvieron el pasado 7 de septiembre siete personas, cinco hombres y dos mujeres , de edades comprendidas entre los 58 y los 25 años, todos de nacionalidad española y del mismo clan familiar, como presuntos autores de los delitos de estafa, de establecimiento de líneas de crédito fraudulentas, usurpación de la identidad civil y pertenencia a grupo criminal. Los detenidos, aunque parte del mismo clan, residían en diferentes poblaciones: dos eran de Tiana. El resto fueron detenidos en Badalona (3), uno de Torrelles de Llobregat y otro de Sant Joan de Vilatorrada. Los detenidos pasaron a disposición judicial el pasado 9 de septiembre y el juez decretó libertad con cargos. La cantidad que se considera que habrían obtenido con sus actividades ilícitas ascendería a los 150.000 euros.
La investigación se inicia cuando, en marzo de 2015, se detectan una serie de compras fraudulentas en una gran superficie comercial de Badalona, realizadas con una tarjeta de crédito. Una vez contrastada la información inicial disponible con los responsables de la empresa operadora de la tarjeta y con el titular que constaba se dieron cuenta de que la alta había realizado fraudulentamente. Esto permitió avanzar en la investigación y se determinó que las tarjetas, una vez solicitadas y aprobadas por la entidad, llegaban a buzones de correo de varias localidades. Se trataba siempre de domicilios vacíos cerca del lugar de residencia de los investigados, donde eran recogidas y activadas. Los investigadores comprobaron que desde la misma IP desde donde se activó la tarjeta fraudulenta se habían dado de alta tres tarjetas más la misma semana. Además, los policías pudieron comprobar que las nóminas aportadas eran falsas y los números de cuenta, inventados.
Este grupo actuaba de manera organizada siguiendo un modus operandi para hacer las estafas. Así, hacían la apertura fraudulenta de cuentas bancarias en varias entidades para posteriormente vincular líneas de crédito que les permitían la retirada en efectivo del crédito solicitado así como la adquisición de productos de electrónica y de consumo general. Además, también hicieron la compra y posterior venta de cuatro vehículos adquiridos a través de préstamos de los que nunca liquidaron las cuotas ya que utilizaban documentación encontrada o robada de las víctimas.
Una vez identificados los integrantes del clan familiar especializado en esta actividad ilícita los agentes investigadores realizaron tres entradas y registros el pasado 7 de septiembre, dos en domicilios de los investigados y otra en un bar. Como consecuencia de las entradas se detuvieron cinco personas y los policías intervinieron material relacionado con las transacciones fraudulentas investigadas: ordenadores portátiles, terminales de telefonía móvil, documentación de la compraventa de vehículos, nóminas falsificadas, facturas de establecimientos comerciales de las compras realizadas y libretas de ahorro y tarjetas de crédito a nombre de personas a las que habrían usurpado la identidad.