
Tensión este martes en el pleno de Palafolls. La sala de plenos se llenó de integrantes de la Hermandad de Antiguos Legionarios de Barcelona y esto puso nerviosos a los miembros del equipo de gobierno. La razón es que en el pleno estaba previsto votar una moción en la que se reprobaba a la Cofradía de San Luis por haber permitido que desfilaran en Semana Santa por las calles del municipio pese a que el plenario lo había prohibido. Algún medio había calentado previamente el ambiente al afirmar, además, de que el alcalde del PSC, Valentí Agustí impondría una multa a los exlegionarios que podría llegar a ser de cientos de miles de euros. En la moción aprobada por el PSC, ICV y ERC, con la abstención de Ciudadanos y el voto en contra del PP, no se impuso ninguna multa a nadie, pero se indicó que – además de reprobar a la Cofradía organizadora del desfile- el ayuntamiento se reservaba la posibilidad de iniciar acciones legales y, de momento, dejaba el mano en caso de la fiscalía. Esta deberá decidir si la decisión de desfilar pese a la no autorización municipal es constitutiva de un delito y si cabe actuar.
Pese a que la presencia de los exlegionarios incomodaba a una parte de los ediles, la cuestión no fue más allá de que se escucharan en el pleno algunos “viva a España” y promesas de que volverían a desfilar por Palafolls. El presidente de la Hermandad tomó la palabra para reivindicar el desfile como una muestra en favor de la libertad de expresión y de culto y para pedir la dimisión del alcalde socialista.
La moción del PSC relativa al desfile a los exlegionarios incluía inicialmente también una parte en la que se pedía la dimisión del concejal del PP, Óscar Berman, por haber permitido el desfile como miembro de la cofradía. El Grupo Municipal de ERC, sin embargo, se opuso a pedir la renuncia por este motivo como proponía el PSC y finalmente los socialistas la sustituyeron por otra en que únicamente se le daba un tirón de orejas en forma de reprobación. Los republicanos ampararon su postura en defensa de la libertad de pensamiento del regidor popular. Óscar Berman, pese a la rebaja evidente, afirmó que se trataba de una moción “sectaria” y responsabilizó directamente al alcalde del PSC, Valentí Agustí de querer perjudicarle.