
La Guardia Civil de Premià de Mar ha denunciado el propietario de una embarcación recreativa de Malgrat de Mar que utilizaba herramientas de pesca profesional. Los hechos se produjeron el pasado 24 de julio cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil detectó una barca de ocio a motor, de 6 metros de eslora, que pescaba con una red de 500 metros. Este sistema está considerado profesional y por tanto prohibido en embarcaciones de recreo.
Cuando la barca llegó a la playa, los agentes procedieron a levantar acta a su propietario por una infracción contra la Ley de Pesca.
Se intervinieron 5,2 kg de pescado de diferentes especies y además, de medidas antirreglamentarias. Se decomisaron las capturas ilegales y se trasladaron a la lonja de Arenys de Mar para su correcta identificación. Además, se requisaron las redes de pesca utilizadas que se dejaron en el puerto de Arenys.
Estas prácticas son una «flagrante competencia desleal», dice la Guardia Civil. Además de causar un perjuicio «directo» al medio ambiente por atentar contra la conservación de los recursos pesqueros y medioambientales.